SER MARICA EN WALLMAPU


El fuego que despierta a los pájaros

Comentario de la poeta Camila Mardones sobre el libro Factory de Francisco V. Huaiquimilla

Factory nos sumerge en este mundo contemporáneo. Los flashes y las cámaras circundan nuestra intromisión en sus páginas. Estamos de pronto confesándonos a la cámara. Hay disparos. Hay joyas y crimen. La tecnología cruza la tinta; los medios de comunicación, la moda y sus frenéticos discursos heteronormalizadores, el desarrollo  socioeconómico basado en un capitalismo salvaje que busca desalojar las sensibilidades que no se cimenten en el consumo, la segmentación rígida de los cuerpos. Hay flashes, resuenan. Las pantallas se repiten y el cuerpo en constante vigilancia es sometido a tortura. La tecnología en función de la vigilancia. La vigilancia en función del desdibujamiento identitario. De la supresión de aquellas identidades no funcionales a la cultura occidental heteropatriarcal. Factory es la máquina de la reproducción de cuerpos que intentan recordar sus nombres; “Intento habitar los nombres en la jaula” ante la puesta afuera/al margen de los dispositivos de poder.
En un mundo donde el capitalismo  simuló ser la posibilidad de la masificación de los discursos, una ilusoria democratización de la tecnología, la posible circulación de multiplicidades es violentada. La carga punitiva y torturadora cae sobre estos cuerpos, culpados constantemente por la búsqueda del habitar una identidad; “No he intentado robar nada más que un nombre”. Las identidades que no son funcionales al proyecto occidental heteropatriarcal son puestos bajo segmentación. Exclusión.
“Naomi / Noelia / Noemí. No es mí / No es lo yo / No es lo ese / No es mi nombre / Negra / Flaca / India / Hocicona / Travestida / Maquillada / Modelo / Borracha”.
El cuerpo de la travestida es vigilado. El mapuche es asesinado. Los huesos de cada huacho son eliminados. La democracia esconde muertos en sus raíces. La moda impone la dieta como la policía las balas. Los cuerpos desaparecen continuamente; “La imagen se repite / repite / repite. La joya sin sangre no brilla”.
Sin embargo, hay un pájaro de fuego que recorre estas letras. Sangra pero no muere. Traiciona su propia enfermedad y resiste. Pájaro de fuego que hace el contrapeso de los grandes relatos hegemónicos. Un pájaro del sur, material y simbólico, que mira la contemporaneidad desde la noche de los desaparecidos. Un pájaro de fuego que resiste a golpe de grito “Quiero abortar este engendro / parir lleno de sangre un cielo encapuchado”.

A todos esos cuerpos fuegos que despiertan a los pájaros desapareci(en)do. Que resuene el eco de todos los que gritan en la noche. En todas las noches, todas. “París, Milán, New York, Nigeria, Somalia, Bosnia, Cuba, Botsuana, Argelia, Nicaragua. Palestina, Grecia, Colombia, Perú, Santiago, Wallmapu”. 


FACTORY - del Osornino Francisco Vargas Huaiquimilla - Ediciones Ají 

1 comentario:

  1. Felicidades por tanto a las letras!
    Chile necesita de más Franciscos, espero tener pronto este ibro en mis inmundas manos.
    Un abrazo

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